The Story of Jesus

El Siervo Injusto

Parte 6

Jesús les dijo,

“Había un hombre rico que tenía un administrador. Este administrador fue acusado de malgastar sus bienes. El hombre rico llamó al administrador y le preguntó acerca de los rumores que él estaba oyendo. .

Y él le exigió cuentas, y dijo al administrador que ya no podía administrar sus asuntos.

Se dijo a sí mismo el administrador,

‘Qué debo hacer, ya que me va a quitar el trabajo de administrar el patrimonio de este hombre rico. Yo no soy lo bastante fuerte para conseguir un trabajo cavando campos y me da demasiada vergüenza mendigar.

Ya sé lo que haré mientras siga teniendo autoridad sobre los asuntos financieros de mis amos’.

Luego, él llamó a cada una de las personas que debían dinero a su rico patrón y les preguntó cuánto le debían.

Él fue a donde uno de los deudores y le preguntó,

¿Cuánto debes?

El hombre le respondió,

‘Yo debo 450 galones de aceite de oliva’.

Dijo el administrador,

‘Mira, reduciré la deuda a 225 galones de aceite de oliva’.

Él fue a donde otra persona que le debía a su amo y le preguntó,

¿Cuánto debes?

El hombre le respondió,

‘Yo debo un granero lleno de trigo’.

Dijo el administrador,

‘Yo reduciré la deuda a medio granero lleno de trigo’.

El administrador hizo esto con todos los deudores de su amo, poniéndolos a todos ellos en deuda con él.

Cuando el hombre rico descubrió lo que había hecho su administrador deshonesto, elogió al administrador injusto por su astucia.

Porque los hijos de este mundo son más inteligentes que los hijos de la luz.

Entonces, Jesús dijo a los que le seguían,

Utiliza los recursos que se te han dado de forma que tengas una recompensa en el futuro, porque este mundo te fallará.

El que es fiel con muy poco, también lo es con mucho; y el que es injusto con muy poco, también lo es con mucho.

Si no has sido fiel en lo temporal y en lo transitorio, ¿quién va a confiarte las verdaderas riquezas duraderas? Si has sido infiel utilizando los bienes ajenos, ¿quién va a confiarte los tuyos?

Ningún siervo puede servir a dos amos, porque o bien odiará a uno y amará al otro, o bien se aferrará a uno y despreciará al otro.

No puedes servir a Dios y a las posesiones materiales.

Los fariseos, que amaban el dinero, se burlaron de la enseñanza de Jesús.

Y Jesús continuó enseñándoles.

Jesús les dijo,

Vosotros os justificáis vosotros mismos ante los hombres, pero Dios conoce vuestros corazones.

¿No comprendes que las cosas exaltadas por los hombres son una abominación ante los ojos de Dios?

Porque todo aquel que se divorcia de su esposa y se casa con otra, comete adulterio. Y la persona que se casa con la que se ha divorciado del marido comete adulterio”.